En medio del ajetreo diario, el estrés puede convertirse en un compañero constante. Pero, ¿sabías que lo que comes puede influir directamente en cómo te sientes? Así como ciertos alimentos pueden aumentar la ansiedad, otros tienen el poder de calmar tu mente y mejorar tu estado de ánimo.
Conoce algunos de los alimentos que te ayudarán a evitar el estrés, así como la ansiedad.
¿Cómo se relaciona la alimentación y el estrés?
Sabemos que los alimentos nos afectan en nuestro cuerpo de manera física, química y mentalmente. Según Karen Hemmes, dietista registrada en el Banner – University Medical Center Phoenix, explica que el consumo frecuente de alimentos con bajo valor nutricional, como carnes procesadas, productos altos en azúcar, cafeína y alcohol, se ha relacionado con un aumento en los síntomas psiquiátricos y niveles elevados de cortisol —la principal hormona relacionada con el estrés.
“Una alimentación basada en alimentos integrales y con bajo consumo de ultraprocesados puede ayudar a mantener niveles saludables de cortisol”, señala.
Además, diversas investigaciones han demostrado que un aumento prolongado del estrés y del cortisol está vinculado con un mayor riesgo de desarrollar obesidad, síndrome metabólico, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, depresión y otros trastornos neurológicos.
5 alimentos que tienes que evitar para incrementar el cortisol, y así el estrés.
- Cafeína en exceso
- Un poco de café, refrescos o energetizantes puedes ayudarte a despertar, pero en grandes cantidades puede alterar el sistema nervioso, elevar el cortisol y afectar tu sueño. Y como sabes, dormir mal solo empeora el estrés, el ánimo y la concentración. Así que se genera un bucle que nunca termina si consumes en exceso.
- Azúcares refinados y alimentos ultraprocesados
- Consumir este tipo de productos puede causar aumentos rápidos en los niveles de glucosa en sangre, lo que activa la producción de cortisol y contribuye al desequilibrio hormonal en el cuerpo.
- Carbohidratos refinados
- El pan blanco, pastas y arroz refinado elevan rápidamente el azúcar en sangre, lo que desestabiliza las hormonas y puede provocar bajones de energía, fatiga y mal humor. Este sube y baja constante también estimula la producción de más cortisol.
- Comida frita
- Sabrosa, sí. ¿Buena para tu salud mental? No tanto. Las frituras suelen prepararse con aceites poco saludables, lo que se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar ansiedad o depresión, según estudios recientes.
- Alcohol
- Su consumo puede desequilibrar las hormonas del cuerpo, provocando un aumento en los niveles de cortisol. Además, interfiere con la calidad del sueño y reduce la capacidad del organismo para enfrentar el estrés de forma efectiva.
No se trata de eliminar estos alimentos para siempre, sino de consumirlos con moderación y optar la mayor parte del tiempo por opciones más naturales y nutritivas. Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán.
¿Qué alimentos nos ayudan a evitar el estrés?
- Nueces y semillas
- Almendras, nueces, semillas de chía o linaza son excelentes fuentes de ácidos grasos omega-3, magnesio y triptófano. Todos estos nutrientes ayudan a mejorar la salud mental y a reducir la ansiedad.
- Pollo
- Es una excelente fuente de triptófano, un aminoácido esencial que favorece la producción de serotonina, la hormona relacionada con el bienestar y el buen estado de ánimo.
- Huevos
- Son una fuente natural de nutrientes esenciales como colina, vitaminas y antioxidantes. La colina, en particular, favorece la salud cerebral y puede ayudar al cuerpo a manejar mejor el estrés y mejorar el estado de ánimo.
- Yogur griego
- Gracias a sus proteínas y probióticos, el yogur griego puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, además de promover una mayor sensación de bienestar.
- Frutas y verduras
- Son clave para reducir el estrés: los plátanos estimulan la serotonina, los arándanos bajan el cortisol, y alimentos ricos en magnesio y potasio (como espinacas, aguacate o naranjas) ayudan a regular el sueño, la presión arterial y el bienestar general.
- Cereales integrales
- Aportan carbohidratos complejos, vitaminas del grupo B, magnesio y potasio, que ayudan a regular el estado de ánimo, reducir el estrés y mantener la energía de forma estable durante el día.
Integrar estos alimentos a tu dieta diaria puede ayudarte a sentirte con más energía, más tranquilo y con mejor ánimo. Recuerda que una alimentación balanceada es solo una parte del autocuidado. Dormir bien, moverte un poco cada día y darte espacio para descansar también cuentan.
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